El Camino de Cristo
Una Peregrinación de Esperanza
Día 1: Cesarea – Megiddo – Tzipori
Día 2: Tel Dan – Cesarea de Filipo – Monte de las Bienaventuranzas – Paseo en barco – Magdala – Tabgha – Mensa Christi – Cafarnaúm
Día 3: Basílica de la Anunciación – Iglesia de San José – Iglesia de la Sinagoga – Iglesia de las Bodas de Caná – Monte de la Transfiguración – Río Jordán
Día 4: Basílica de la Natividad – Campo de los Pastores – Museo de Israel – Lugar de nacimiento de Juan el Bautista – Iglesia de la Visitación
Día 5: Jericó – Masada – Qumrán – Mar Muerto
Día 6: Centro Davidson – Cúpula de la Roca – Muro Occidental – Túneles del Muro Occidental – Piscinas de Betesda – Ciudad de David
Día 7: Cenáculo (Sala de la Última Cena) – Tumba del Rey David – San Pedro en Gallicantu – Iglesia del Santo Sepulcro – Jardín de la Tumba – Capilla de la Ascensión – Iglesia del Pater Noster – Dominus Flevit – Getsemaní
Día 1: Cesarea – Megiddo – Tzipori
Nuestro viaje por Tierra Santa comienza en Cesarea, la antigua capital romana de Judea, construida por el Rey Herodes el Grande a orillas del Mar Mediterráneo. Esta ciudad portuaria histórica tuvo un papel central en el cristianismo temprano: aquí, Pedro predicó a Cornelio, el primer gentil en recibir el Evangelio (Hechos 10). Este encuentro marcó un punto de inflexión en la Iglesia primitiva, ya que el mensaje de Cristo se extendió más allá de la comunidad judía. El Apóstol Pablo también fue encarcelado y juzgado aquí antes de ser enviado a Roma (Hechos 23), y Poncio Pilato, el gobernador romano que condenó a Jesús, gobernaba desde este lugar. Cesarea también fue escenario del estallido de la Gran Revuelta Judía, que eventualmente llevó a la destrucción del Segundo Templo en Jerusalén.
Desde Cesarea, continuamos hacia Megiddo, uno de los sitios arqueológicos y proféticos más importantes de Tierra Santa. Ubicado en un cruce estratégico del mundo antiguo, Megiddo fue escenario de numerosas batallas desde la época de los cananeos hasta los reyes de Israel. Se menciona en el Libro de los Reyes como una ciudad fortificada por el Rey Salomón (1 Reyes 9), y sus ruinas incluyen antiguas puertas, establos y un avanzado sistema de agua subterráneo. Desde sus alturas, se divisa el Valle de Jezreel y se le conoce como el sitio profetizado del Armagedón, el lugar de la batalla final entre las fuerzas del bien y del mal (Apoc 16).
Luego visitamos Tzipori (Sepphoris), una antigua ciudad cerca de Nazaret, rica en patrimonio judío y grecorromano. Aquí caminarás por calles bien conservadas de los períodos del Segundo Templo y bizantino, y verás algunos de los mosaicos más finos de Israel, incluyendo uno en la sinagoga que representa el Templo judío y la vida cotidiana de la época. Como importante centro de comercio y artesanía en Galilea, muchos creen que Jesús pudo haber trabajado aquí como carpintero durante su juventud.
Cena y alojamiento en Nazaret.
Día 2: Tel Dan – Cesarea de Filipo – Capernaúm – Paseo en barco – Tabgha – Mensa Christi – Magdala
Comenzamos temprano con una visita a Tel Dan, uno de los sitios bíblicos más importantes del norte de Israel. Esta ciudad marcaba el límite norte del Reino de Israel y fue clave durante el reinado de Jeroboam (1 Reyes 12), el primer rey del reino del norte tras la división de Israel. Tel Dan destaca por ser el único sitio donde se ha encontrado la inscripción “Casa de David”, confirmando históricamente relatos bíblicos. Desde aquí, contemplamos el Monte Hermón, posible lugar de la Transfiguración de Jesús y frontera natural con el Líbano.
A continuación, visitamos Banias, bíblicamente conocido como Cesarea de Filipo, donde Pedro declaró que Jesús es el Cristo (Mat 16). Exploraremos los antiguos templos paganos y disfrutaremos de un momento de oración junto a las refrescantes aguas que brotan del Monte Hermón.
Luego nos dirigimos al Monte de las Bienaventuranzas, donde Jesús pronunció el Sermón del Monte (Mat 5-7). Las vistas panorámicas sobre el Mar de Galilea crean un espacio perfecto para la oración y reflexión sobre sus enseñanzas.
Después abordaremos un barco para un paseo espiritual por el Mar de Galilea, recordando los milagros de Jesús, como caminar sobre el agua (Mat 14) y calmar la tormenta (Mat 8).
Tras el almuerzo, visitaremos Tabgha, sitio de la Multiplicación de los Panes y los Peces (Mat 14), y la Iglesia del Primado de Pedro (Mensa Christi), donde Jesús se apareció a sus discípulos tras la Resurrección, reafirmando su llamado a Pedro después de sus tres negaciones (Jn 21). También podrás tocar las aguas del Mar de Galilea y caminar donde Jesús caminó.
Continuamos a Capernaúm, la ciudad de Jesús (Mat 9), donde realizó muchos milagros, incluyendo sanar a la suegra de Pedro (Mat 8). Visitaremos la Casa de Pedro y la Sinagoga Blanca, explorando los restos de esta ciudad bíblica.
Finalizamos el día en Magdala, ciudad natal de María Magdalena, visitando la antigua sinagoga donde se cree que Jesús predicó (Mat 4) y la piedra sobre la que colocó la Torá.
Regreso a Nazaret para cena y alojamiento.
Día 3: Basílica de la Anunciación – Iglesia de la Sinagoga – Caná – Monte Tabor – Río Jordán – Belén
El día comienza con una visita a la Basílica de la Anunciación en Nazaret, el lugar donde el Ángel Gabriel se apareció a María y le anunció que concebiría y daría a luz a Jesús, marcando el inicio de la Encarnación (Lc 1). Aquí es donde el Verbo se hizo carne. Desde allí, nos dirigimos a la cercana Iglesia de San José, considerada la vivienda donde Jesús vivió con sus padres tras regresar de Egipto.
Pasearemos por Nazaret hacia la Iglesia de la Sinagoga, asociada con las enseñanzas de Jesús y su rechazo en su ciudad natal (Lc 4).
Luego viajaremos a Caná, donde Jesús realizó su primer milagro, convirtiendo el agua en vino durante una boda (Jn 2). Visitaremos la Iglesia de las Bodas, construida para conmemorar este acontecimiento, y exploraremos los restos arqueológicos bajo la iglesia, que ofrecen una visión del contexto histórico del milagro.
Después, nos dirigimos al Monte Tabor, sitio tradicional de la Transfiguración, donde Jesús reveló su gloria divina a Pedro, Santiago y Juan, acompañado por Elías y Moisés (Mat 17). Mientras exploramos la iglesia en la cima, disfrutaremos de impresionantes vistas panorámicas del Valle de Jezreel, que enriquecen la experiencia espiritual.
Tras el almuerzo, nos dirigimos al Río Jordán en Yardenit, donde los peregrinos pueden reafirmar sus votos bautismales y reflexionar sobre la importancia espiritual de este lugar sagrado. Luego, continuamos por el Valle del Jordán, pasando por el histórico Bet Shean y las montañas de Gilboa, donde el Rey Saúl encontró su trágico final en batalla contra los Filisteos (1 Sam 31).
Finalmente, llegamos a Jerusalén para hacer una parada en el Monte de los Olivos, donde admiraremos y honraremos la ciudad santa.
El día concluye en Belén para la cena y alojamiento.
Día 4: Iglesia de la Natividad – Campo de los Pastores – Museo de Israel – Nacimiento de Juan el Bautista – Iglesia de la Visitación
El día comienza con una visita a la Iglesia de la Natividad en Belén, el sitio tradicional que marca el lugar de nacimiento de Jesús (Lc 2). Aquí veremos el pesebre donde el Salvador fue colocado, cumpliendo la profecía de Miqueas de que el Mesías nacería en Belén (Miq 5).
A continuación, visitaremos el Campo de los Pastores, el lugar sagrado donde el Ángel Gabriel se apareció a los pastores, anunciando la buena noticia del nacimiento de Jesús. También fue aquí donde los ejércitos celestiales de ángeles alabaron y glorificaron a Dios, tal como lo describe el Evangelio de Lucas (Lc 2).
Después del almuerzo, nos dirigiremos al Museo de Israel, que alberga el modelo de Jerusalén del período del Segundo Templo, ofreciendo una visión de cómo era la ciudad en tiempos de Jesús. También visitaremos el Santuario del Libro, donde se exhiben los famosos Rollos del Mar Muerto, proporcionando valiosa información sobre el mundo bíblico.
Luego viajaremos a la pintoresca aldea de Ein Karem, sitio de la Iglesia de la Visitación, construida para honrar la visita de María a su prima Isabel en la región montañosa de Judea (Lc 1). Fue aquí donde Juan el Bautista saltó en el vientre de su madre y María proclamó el hermoso Magníficat, alabando a Dios por sus grandes obras.
También visitaremos el lugar de nacimiento de Juan el Bautista, donde Zacarías, su padre, pronunció el Benedictus, agradeciendo a Dios por el nacimiento milagroso de su hijo en su vejez, tal como se relata en el Evangelio de Lucas (Lc 1).
Por la tarde, regresaremos a Belén para la cena y una tranquila noche, reflexionando sobre la profunda importancia espiritual de los sitios visitados durante el día.
Día 5: Jericó – Masada – Qumrán – Mar Muerto
El día comienza temprano mientras nos adentramos en el Desierto de Judea, dirigiéndonos hacia la antigua ciudad de Jericó, uno de los lugares bíblicos más importantes. En Jericó, reflexionaremos sobre eventos clave de la Biblia, incluyendo la conquista de Jericó por las 12 tribus de Israel (Jos 6) y la tentación de Jesús por Satanás tras su bautismo en el Río Jordán (Mat 4). También pasaremos junto al tradicional sicómoro, recordando el momento en que Jesús perdonó a Zaqueo y mostró su gracia a un pecador (Lc 19).
Desde Jericó, conduciremos hacia el sur, siguiendo la costa del Mar Muerto y atravesando la belleza escarpada del Desierto de Judea. En el camino hacia Masada, pasaremos por Ein Gedi, el oasis desértico donde David huyó del rey Saúl (1 Sam 24), buscando refugio en este lugar remoto y sagrado. Luego continuaremos hacia Masada, sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la última fortaleza de los judíos durante la Gran Revuelta contra los Romanos. Aquí exploraremos la antigua fortaleza en la cima de la montaña y disfrutaremos de impresionantes vistas del Desierto de Judea y el Mar Muerto.
Tras descender en teleférico, continuaremos hacia Qumrán, el lugar donde se escribieron los Rollos del Mar Muerto hace más de 2,000 años. Exploraremos los restos arqueológicos y conoceremos la fascinante historia de estos antiguos textos y de la comunidad que allí habitaba.
A continuación, nos dirigiremos al Mar Muerto, el punto más bajo de la Tierra, para disfrutar de un relajante baño flotante en sus aguas salinas y ricas en minerales. Esta experiencia única ofrece renovación física y espiritual, además de los beneficios terapéuticos del barro del Mar Muerto.
Concluimos el día con un paseo panorámico de regreso a Belén, donde disfrutaremos de la cena y de una tranquila noche, reflexionando sobre los importantes sitios bíblicos visitados.
Día 6: Centro Davidson – Monte del Templo – Muro Occidental – Túneles del Muro Occidental – Piscinas de Betesda – Ciudad de David – Túnel de Ezequías
Temprano en la mañana, nos dirigimos a la Ciudad Vieja de Jerusalén, donde visitaremos el Centro Davidson y los Escalones del Sur del Templo. Aquí conoceremos la historia de Jerusalén a través de los siglos y su importancia en nuestra fe. También exploraremos los restos arqueológicos que existieron alrededor del Templo de Jerusalén.
Más tarde, visitaremos el Monte del Templo y recorreremos el complejo. Aunque actualmente alberga importantes sitios islámicos, sigue siendo un lugar de gran relevancia histórica según la Biblia. Desde allí, continuaremos hacia el Muro Occidental, donde los visitantes tendrán la oportunidad de dejar una nota de oración en las piedras de más de 2,000 años de antigüedad, un momento de reflexión en uno de los lugares más sagrados de Jerusalén.
A continuación, realizaremos una visita guiada a los Túneles del Muro Occidental para descubrir tesoros arqueológicos ocultos que revelan la destrucción de Jerusalén en el año 70 d.C. por los Romanos, un evento que resuena en la historia Judía y Cristiana.
Tras salir de los túneles, visitaremos las Piscinas de Betesda, donde, según el Evangelio de Juan, Jesús sanó a un hombre que había estado paralítico durante 38 años (Jn 5). Este sitio ofrece una conexión tangible con los milagros de Jesús y el Nuevo Testamento.
Después del almuerzo, exploraremos la Ciudad de David, el sitio original de la antigua Jerusalén. Aquí descubriremos los primeros días de la ciudad y caminaremos entre restos arqueológicos que iluminan la historia bíblica. El recorrido continúa por el pozo de Warren y el conocido Túnel de Ezequías, finalizando en la Piscina de Siloé, donde Jesús sanó a un ciego, según se relata en las Escrituras (Jn 9).
Cena y noche en Belén, lugar de nacimiento de Jesús.
Día 7: Sala de la Última Cena – Tumba de David – San Pedro en Gallicantu – Iglesia del Santo Sepulcro – Jardín de la Tumba – Capilla de la Ascensión – Pater Noster – Dominus Flevit – Getsemaní
Comenzamos el día con una visita al Monte Sion en Jerusalén, un lugar clave relacionado con varios eventos importantes de la Biblia. Nuestra primera parada es la Sala de la Última Cena, tradicionalmente identificada como el lugar donde Jesús celebró la Última Cena y el Día de Pentecostés, cuando el Espíritu Santo descendió sobre los primeros creyentes (Hech 2).
Cerca, visitaremos la tradicional tumba del Rey David, seguida de San Pedro en Gallicantu, ubicado cerca de la casa de Caifás, el sumo sacerdote. Según los Evangelios, aquí fue donde Pedro negó a Jesús tres veces antes de que cantara el gallo, tal como Jesús había predicho (Mat 26).
A continuación, nos dirigimos a la Iglesia del Santo Sepulcro, uno de los lugares propuestos para la crucifixión, entierro y resurrección de Jesús.
Continuamos recorriendo los mercados de la Ciudad Vieja, saliendo por la Puerta de Damasco, hasta llegar al Jardín de la Tumba. Este sitio tranquilo se asocia a menudo con la crucifixión, entierro y resurrección de Cristo, ofreciendo un lugar de reflexión, oración y adoración, considerado por muchos como un poderoso recordatorio visual de la tumba vacía (Jn 20).
Después del almuerzo, visitaremos el Monte de los Olivos, un área rica en significado bíblico y profecía. En la cima, nos detendremos en la Capilla de la Ascensión, donde se cree que Jesús ascendió al cielo. Según las Escrituras, regresará de la misma manera (Hech 1).
Luego continuaremos a la Iglesia Pater Noster, tradicionalmente asociada al lugar donde Jesús enseñó el Padre Nuestro a sus discípulos. Desde allí, descenderemos a Dominus Flevit, el sitio donde Jesús lloró sobre Jerusalén (Lc 19), expresando su tristeza y compasión por la ciudad.
Nuestra última parada será en Getsemaní, un jardín lleno de antiguos olivos, símbolos de paz, realeza y entrega espiritual. Aquí Jesús oró antes de su arresto, diciendo: “No se haga mi voluntad, sino la tuya” (Lc 22), modelando una completa obediencia al Padre.
Notas:
✔ El tamaño del grupo para este itinerario está limitado a 15 participantes.
✔ El orden de los sitios puede variar según la discreción del guía, condiciones de tráfico, horarios de apertura y vuelos.
✔ Los alojamientos nocturnos pueden variar según la disponibilidad de hoteles y las necesidades del grupo.